Así lo demuestra el estudio realizado por Journal of Europea Industrial Training en el artículo “Business-driven management development: developing competences which drive business performance”, en el cual demostraron que para un desempeño más eficiente de parte de sus líderes, es necesario promover las siguientes competencias:
- Liderazgo
- Orientación a resultados
- Influencia y negocación
- Atracción y desarrollo de talento
- Comunicación
- Adaptabilidad
- Desarrollo y mantenimiento de relaciones
- Orientación al cliente
- Diversidad
- Espíritu emprendedor.
Estas competencias cobran muchísima relevancia hoy, ya que en muchas
organizaciones los líderes no solo deben lidiar con tener una alta performance, sino también, tienen que ser capaces de liderar a distancia equipos remotos, lo que implica en primer lugar promover un clima de confianza en su equipo y jefaturas, ya que es imposible tener un buen trabajo en equipo, si no existe confianza en sus colaboradores.
En segundo lugar, es crucial tener objetivos compartidos, de esta manera, el
equipo velará por cumplir sus resultados individuales, al mismo tiempo en que estos impactan a nivel grupal y de equipo.
En tercer lugar, tener una buena comunicación, de manera asertiva, permite tener conflictos sanos con el equipo, lo cual es muy bueno para promover soluciones creativas frente a los nuevos escenarios altamente competitivos.
Asimismo, la flexibilidad y adaptabilidad permiten enfrentar los nuevos desafíos de manera más eficiente, ya que promueven que el equipo pueda reaccionar efectivamente ante los nuevos desafíos.
¿Cómo lograr esto?
Para lograr esto, las organizaciones deben proveer las condiciones necesarias para que los líderes puedan desarrollar el talento en sus equipos. Esto implica, promover el desarrollo de habilidades de liderazgo para conocerse, de esta manera, los líderes sabrán como motivar a su equipo y cómo promover el talento de cada miembro para que se convierta en fortalezas.
Al mismo tiempo, al tener mayor conocimiento sobre las competencias y
habilidades de cada uno, será más fácil promover un entorno motivante que permita lograr el mejor desempeño, de acuerdo al talento innato de cada uno.
Esto a su vez, implicará que el líder será capaz de dirigir y delegar tareas
efectivamente, lo que implicará lograr mejores resultados con menos costo de energía y más motivación.
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